sábado, 14 de febrero de 2009

Aura Mazhda y Ahrimán

0 comentarios


Ahura Mazda (Señor Sabio) fue el Dios supremo de la religión, hoy casi olvidada, del Mazdeísmo o Zoroastrismo. Está religión floreció en lo que hoy es Irán entre los siglos II y I a.C. Se considera que es una de las religiones Iraníes que más influencia ha tenido en las grandes religiones actuales, a través del Judaísmo. En contraposición existe otra divinidad que disminuye su poder: Ahrimán, principio del mal. Posteriormente el nombre de Ahura Mazda se transformó en Ormazd.

Ormazd, creador del bien y del mal, delega su justicia, ciencia y poder a los amasha spantas, que son un grupo de 6 dioses reunidos alrededor de Ormazd y unidos entre sí por un vínculo de índole moral. Con ellos gobierna y lucha contra Ahrimán, príncipe del engaño, la mentira y las tinieblas. La historia del orbe se cifra en el ininterrumpido combate entre Ormazd y Ahrimán, y acabará con la victoria de Ormazd.

Además del juicio personal, hay un juicio universal, anterior a un regreso a la edad de oro, que significará el triunfo definitivo de las potencias del bien. Esto ocurrirá en el último de los 4 periodos en que se divide la historia del mundo. Surgirá un Saoshyant (Salvador), se celebrará el juicio final y se construirá una creación nueva. Esto irá precedido de una resurrección general y el mal desaparecerá para siempre.

Lo más sobresaliente de esta doctrina es la noción de que llegada la muerte, lo principal no es haber obrado conforme a las exigencias de una conciencia recta, sino haber decidido pertenecer a la comunidad religiosa.

Día del san valentín

0 comentarios

No sabía si escribir sobre este día. De hecho no representa nada para mi. No soy insensible, creo en el amor. El amor es el sentimiento que te une a otras personas, que las hace importantes para ti. Lo podemos ver y sentir por todas partes: está en tus relaciones con tus padres, hermanos, amigos, pareja y cualquier persona, animal o cosa que sea emocionalmente significativa para ti.

Pero eso de celebrar un día solo para el amor de pareja y el amor por los amigos se me hace absurdo. Yo, afortunadamente, no tengo pareja, pero si tengo amigos. Y a los amigos los veo de vez en cuando y procuro que el tiempo que nos damos sea un tiempo de calidad y calidez en el que todas las partes involucradas estemos a gusto. Eso es más importante y une más que detalles estúpidos como tarjetas, chocolates, flores, paletas o cualquier tontería que se les ocurra. El sentimiento debe estrecharse con buenos ratos, con empatía, con buenas charlas, con ideas comúnes, con inteligencia emocional e intelectual para que cualquier día del año sea bueno para decir: te aprecio, te quiero, eres importante para mi. Sin que medie ninguna fecha impuesta por los vendedores de chucherias.
Palabra de Dios.